U.3 - TEMA 9: Violencia/indisciplina escolar. Protocolos.

 Conflictos en la comunicación

Malos entendidos entre compañeros, mala comunicación, falta de comunicación, falta de comprensión, falta de intercambio, falta de capacidad de escucha. Observó esta problemática, por ejemplo en el terciario donde me desempeño cumpliendo funciones, con un hecho puntual, que llamó la atención: la renuncia de los delegados. 

En donde en una reunión los mismos detallan lo antes mencionado, falta de diálogo, falta de comunicación, falta de comprensión, falta de intercambio, falta de capacidad de escucha, lo cual hace poco llevadero el rol de delegado. 

El delegado es quien representa y media con la institución, autoridades y profesores, y que no hayan podido continuar con el rol llamó la atención. Había mucho revuelo, ansiedad, preocupación, que generaba malestar significativo en el grupo. Y los rumores, entredichos, falta de consenso, cambios y crisis personales e institucionales colaboraron en empeorar cada vez más la relación y comunicación del grupo. 

Si bien el conflicto suele expresarse por medio de manifestaciones de uno o varios alumnos, sería erróneo individualizarlo y desconocer las relaciones o vínculos que se hubieran establecido previamente en la institución y el contexto social en donde se encuentran inmersos los alumnos.

En muchas ocasiones hay una relación directa entre prácticas discriminatorias y situaciones de acoso u hostigamiento. La institución escolar, por formar parte de un contexto global, tiende a reproducir conductas sociales y contribuye a la internalización de estereotipos, creencias y prejuicios que permanecen, con mayor o menor visibilidad, a través del tiempo. Estos mecanismos de reproducción suelen estar tan naturalizados que sus actores no alcanzan a registrarlos como déficit o cuestiones a revisar. Las actitudes discriminatorias forman parte de este sistema de valores que está arraigado profundamente a través de procesos históricos y culturales de exclusión. Es así que aparecen como de difícil lectura introspectiva de los propios actores sociales y, en particular, de los integrantes de las comunidades educativas.

Frente a esta situación nos reunimos con los delegados y algunos docentes en busca de  herramientas útiles para solucionar/intervenir en el conflicto donde nos parecio necesario comenzar a intervenir en el conflicto se deberán abordar diferentes temáticas: 

● La comunicación. 

● Las emociones. 

● El grupo y las habilidades sociales. 

● La Violencia y los tipos de violencia. Violencia verbal. 

● La Institución educativa. Y rol del delegado.

Será importante que docentes y alumnos puedan democratizar los espacios, reflexionando sobre las representaciones que cada uno tiene, a fin de revisar modos de relacionarse, tanto individual como grupalmente.

Se sugiere, además, utilizar dispositivos que operen como disparadores de debates y permitan la reflexión sobre el respeto por la diferencia, el reconocimiento del otro como sujeto, el respeto de la intimidad y el cuidado de sí mismos como condiciones necesarias para garantizar sus derechos.

Para finalizar, sostenemos que la opción de no intervenir frente a estas situaciones implica la indiferencia como mensaje, y constituye el riesgo de interpretarse como la legitimación de los conflictos en la comunicación. De ahí la relevancia de la responsabilidad de la institución escolar para promover una escuela inclusiva como parte de un Estado inclusivo e igualitario.